Avant Garde
2015 instalación, escultura
Avant Garde
Leonardo Portus
La instalación toma su origen de un dato biográfico del artista que reconoce en la tipografía Avant Garde de los letreros del Centro Comercial Nuevo Persa, donde se aloja Arte K-35, y el Persa 40 cercano a la casa donde vive en San Bernardo, el verdadero sello de diseño de la economía y publicidad en Dictadura, símbolo setentero de una economía pujante y moderna que se quería propugnar. AVANT GARDE a través de un objeto escultórico realizado con material reciclado, espejos y pvc autoadhesivo cromado, se erige como una pieza extraña con un rendimiento visual inversamente proporcional al valor económico de su materialidad, y que además gira con un movimiento aparentemente inútil para la lógica económica de este tipo de centros comerciales, una baratija absurda y a la vez tan ilusoria como el ímpetu económico de la retórica mercantilista que dio a la luz a los Persa, un brillo tan extraño como que en un lugar como éste exista un espacio de arte como AK-35.